En las últimas dos décadas, la conocida pirámide alimentaria ha cambiado drásticamente. La preocupación por los posibles efectos de pesticidas, hormonas, organismos modificados genéticamente y antibióticos, así como el deseo de evitar alimentos muy procesados e ingredientes artificiales, son los principales motivos por los que las personas han cambiado sus hábitos alimenticios y compran más productos ecológicos.